Por Leonel Iparraguirre González
Aunque Leonardo Rosales Labrada es natural de Jiguaní, en la oriental provincia de Granma, de su rica trayectoria laboral como educador, conocen varias localidades y provincias del país. Con 61 años de edad sobre sus hombros, relata que estudió magisterio en la Escuela Pedagógica Rubén Bravo, de Manzanillo, donde alcanzó el título de Maestro Primario en el curso 1981-1982.
Sus primeros momentos como docente fueron en un Centro escolar de Campechuela, , pero más tarde fue a residir a la ciudad de Cienfuegos donde rápidamente se vinculó como educador en una Institución Educativa de aquel. lugar, como maestro primario..
Por intermedio de una amistad conoció la pintoresca localidad de Turiguanó, en el municipio avileño de Morón, donde decidió quedarse y se reincorporó al sector de la educación, como maestro de la escuela rural Alfredo Peña.
“Aquí laboró en la actualidad como director de esa escuela, donde se atiende una matrícula de 43 estudiantes, con el aporte de seis docentes”, explica Leonardo.
La escuela Alfredo Peña se localiza en la comunidad Fajardo, perteneciente al Consejo jo Popular Turiguanó, donde la unidad y el interés, conjuntamente con el apoyo de las familias, la convierten en lugar más querido de la comunidad.