Por Arquímedes Romo Pérez
El 14 de Junio de 1958, en horas tempranas, se abre la puerta de acceso al nuevo Estadio dirigido por la entidad “Operadora Deportiva Morón S.A.” para recibir a la sedienta afición que apasionada espera ansiosa la presentación de los Reyes del Azúcar, frente al potente equipo estadounidense “Agujas de Miami”, en un partido oficial de la Liga Internacional Triple A, en la que intervienen equipos de Canadá, Estados Unidos y Cuba.
Como es de suponer desde muy temprano la afición colma la nueva gradería que, según la voz popular, se llena “de bote en bote”. Con los acostumbrados factores comprometidos con la organización, todo el personal técnico que interviene es el que habitualmente lo hace en la capital del país, con la sola excepción del pizarrero Emilio Angulo y el electricista Rivalta, celoso cuidador de la iluminación. Tal y como se ha previsto, todos los elementos instalados en el nuevo “olímpico” funcionan a la perfección y el numeroso público asistente se retira a sus hogares realmente complacido.
La radio local, esta vez, queda al margen del espectáculo deportivo. La Liga tiene sus contratos previos que deben respetarse y la tropa de “Los Deportes al día” disfruta desde las gradas. No obstante, al día siguiente el habitual programa de 28 minutos resulta pequeño para reseñar los detalles y demostrar que, pese a la buena asistencia, la situación económica del momento, el gran riesgo que significa salir a la calle en horario nocturno y la falta de comunicaciones adecuadas para viajar a la ciudad desde los barrios, impiden que la moderna instalación cubra todas sus localidades pese a lo módico de los precios de entrada.
Paralelamente se dan los primeros pasos en la organización de la Academia de talentos. Junto a los representantes de la ”Operadora Deportiva Morón” y del Director del plantel Doctor José Zamora González, se captan otros conocedores que, hasta entonces, visitan La Trocha como buscadores de talentos, y otros compañeros de la ciudad que como Oliden Companioni, Juan Vicente Corrales,Rolando Almanza y Eulogio Villanova (padre), se convierten en valiosos auxiliares para organizar, entrenar y redondear un equipo de beisbol muy joven, que con el nombre de “Gallos de Morón” compite en toda la Isla y, en un breve período, aporta talentos y valores a las organizaciones deportivas interesadas.
En este grupo fundacional de la Academia de los Cubans en el nuevo Estadio de Morón, están Eddwin Regis Simpson, de Las Tunas; Raúl Despaigne, de Santiago de Cuba; José Antonio Hoyos, de Las Villas, al igual que Cándido Andrade, Ricardo Díaz de Quesada y José Ramón Villar; Ultus Álvarez, de Cienfuegos; Alberto Álvarez de Pinar del Río; Tony Zardón, de Oriente y varios jugadores del territorio como Eloy González, Raúl Díaz, José Hernández Drake, Evelio (Bello) Vázquez, Onelio (El Látigo) Ordaz, (El Congo) Macías, Ñiquito Parada, Arnaldo Fragela, Tomás Centeno, Ramón Romero y otros con menor protagonismo. Es válido apuntar que no toda esta matrícula hace acto de presencia en la Academia
Debe puntualizarse, a los efectos de caracterizar esta investigación, que en los años cincuenta del pasado siglo se carece de los recursos y medios actuales para guardar datos y memorias, por cuya razón y desde la puesta en acción de la Liga Campesina de La Trocha en 1952, el colectivo de “Los Deportes al día”, único interesado en la información deportiva en la localidad, asume la responsabilidad de controlar y publicar los resultados del beisbol mediante las páginas del periódico “Renovación”, el cual se publica mensualmente y se dedica enteramente al deporte. El periodista Silvio Rodríguez Acosta en la dirección, este redactor en la administración y Rolando Crespo Rodríguez en la edición y control de estadísticas, conforman el colectivo. De manera oficial no existe un organismo o departamento interesado en la conservación de datos y estadísticas, lo cual incide negativamente en la conformación histórica del béisbol en esta rica etapa.
Sin embargo, con el triunfo de la Revolución que “cambia todo lo que debe cambiarse”, el equipo se disgrega y queda solo al frente de la nave el director, quien guarda celosamente toda la historia contenida en el periódico, pero lamentablemente después de su merecida jubilación, enferma, fallece y con su desaparición física manos indolentes hacen desaparecer todo el archivo de periódicos y, por tanto, desaparece con el mismo toda la historia escrita hasta ese momento en el “olímpico de Morón”. Con esto se resume que, dolorosamente, no se cuente hoy con los resultados fieles, numéricos, de los enfrentamientos de los Cuban Sugar Kings con Miami y Buffalo correspondientes al campeonato de 1958.
Resulta de interés recordar que en 1959, primer año del gobierno revolucionario cubano, la Liga Internacional Triple A continúa en acción y se sigue jugando en el Estadio de la ciudad. Gracias a un conocido pelotero cubano nacido en Morón y radicado en el exterior, Eulogio (Papocito) Villanova, que lo publica en las redes sociales, se conoce que los días 3, 4 y 5 de abril de 1959 se juega en el Estadio de Morón una serie de cuatro partidos entre los equipos Memphis, de la Asociación del Sur, dirigido por Luke Appling y los Cubans Sugar Kings, comandado por Preston Gómez. El día 3 se efectúa juego sencillo a las 8 y 30 PM, el 4 doble encuentro a las 7.00 y el 5 otro partido sencillo a las 8 y 30. La entrada a 80 centavos, 1.20 los palcos y 50 centavos los niños.
La propia fuente precisa que a la siguiente semana, los días 10, 11 y 12 de abril de 1959 el estadio de Morón vuelve a vestirse de gala con otra importante serie internacional con la cual se repletan todas las localidades. Esta vez el “olímpico” moronense es visitado por el equipo canadiense de Montreal, uno de los más poderosos del circuito Triple A, en otra serie de 4 desafíos; el primero sencillo a las 8 y 30 al precio de 80 centavos la entrada, el segundo doble al costo de 1.40 y el tercero sencillo a las 7 al pecio de 1.00 la gradería y 1.40 los asientos de palco. De esta serie, aquí no se conocen los resultados, incluso en esa fecha son otras las condiciones de alojamiento de los atletas foráneos que, hasta entonces, pernoctan en San José del Lago, Mayajigua,
Aunque no hay información precisa al respecto se considera que la “Operadora Deportiva Morón S.A.” y por ende “el equipo de jóvenes académicos”, cesa sus funciones en el estadio al cambiar el organismo deportivo cubano de la Dirección General Nacional de Deportes, representada en el municipio por el profesor José Manuel Torres(El Chino), para el naciente INDER, dirigido por Manuel Hernández Concepción con Rolando Almanza (Cubiles) como primer Comisionado Regional de Beisbol.
(Memorias del Equipo de Historia del Deporte de Morón.)