Granma
Hace 70 años, una representación de la juventud cubana emprendía viaje a Santiago de Cuba y Bayamo. Era temporada de carnaval en Oriente, pero no iban a celebrar. Como mártires o héroes, sin ellos mismos saberlo, iban a entrar en la historia. Hoy nos acompañan dos de aquellos muchachos: el General de Ejército Raúl Castro Ruz, Líder de la Revolución Cubana y el Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez.
A ellos, dedicó el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, sus palabras al concluir el Primer Periodo Ordinario de Sesiones de la X Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular.
No se trata solo de un acto de justicia histórica –dijo–, se trata de reconocer a dos hombres que siguen asaltando fortalezas todos los días con el pie en el estribo.
El mandatario reconoció que «hemos tenido una buena Asamblea», incluyendo el llamado a poner nombre y apellido, causas y posibles soluciones a nuestros problemas; que no tienen que ver con el bloqueo, o que refuerzan el omnipresente bloqueo por inacción, apatía, insensibilidad, incapacidad o por simple cansancio y falta de fe en que será posible vencer las dificultades.
Esta sesión, agregó, tiene como mérito abordar con sentido de la urgencia los problemas de nuestra cotidianidad como la producción de alimentos, la creciente inflación, los precios abusivos, la generación eléctrica; y lo hemos hecho sin abandonar asuntos pendientes de carácter estratégico como la Política del Estado para atención a la niñez, la adolescencia y la juventud, o la Ley del Código Penal Militar.
Desde la discusión en comisiones en las que tuve la oportunidad de participar, sentí mejoraron el vínculo de las diputadas y los diputados con la población; es decir, con los electores a quien nos debemos.
Remarcó que estos meses de intercambio con el pueblo han sido la prueba de lo que significa trabajar con el oído pegado a la tierra. «Una Asamblea en sesión permanente, desconectada del pueblo que le eligió, no podría llamarse nunca del Poder Popular».
Recordó que los enemigos de la nación cubana apuestan a fracturar la unidad nacional y separar al pueblo de su Gobierno. Pero la opción de rendirnos fue borrada del ADN de los cubanos.
«En lo personal, no me imagino a Cuba sin la fuerza moral de su Partido y la preocupación permanente de un Gobierno cuya misión consiste en garantizar la educación, la salud y otros servicios bajo las condiciones de un bloqueo reforzado y la inclusión en una lista que cierra los accesos a oportunidades de financiamientos», expresó.
Se sabe, señaló, que la mayor fuerza de Cuba está en su pueblo y en su resistencia emblemática. Por eso, agregó, también nos atacan sembrando matices de ingobernabilidad, estado fallido e inseguridad ciudadana.
Por otra parte, el Presidente comentó que justicia social no significa que se puede producir el asistencialismo ni al igualitarismo; es repartir la riqueza creada por todos entre todos, pero de modo diferenciado, de manera que gane más quien aporta más y se asista a los imposibilitados de aportar.
Díaz-Canel reconoció que la guerra económica, comercial y financiera de Estados Unidos, particularmente su territorialidad, la crisis económica mundial y la lenta recuperación pospandemia, continúan siendo los principales obstáculos para la implantación de la estrategia en la reanimación de la economía en el corto, mediano y largo plazo.
A pesar de esos obstáculos, manifestó que el informe de Economía y Liquidación del Presupuesto del primer semestre del año, nos dice que las medidas de implementación, sin llegar todavía a los resultados esperados, indican una muy ligera tendencia a la recuperación.
«Cada medida tiene retos en su implementación, por eso insistimos que su implementación siempre tome en cuenta el tratamiento a las personas y familias en situación de vulnerabilidad para evitar impactos negativos», precisó.
El Jefe de Estado resaltó que como explicó el ministro de Energía y Minas, el Sistema Eléctrico Nacional, aun cuando todavía no funciona en condiciones óptimas, se ha ido recuperando como parte de la estrategia trazada por el país.
Añadió que la situación en el actual mes de julio es mucho más favorable que la vivida en 2022, esto a pesar del incremento de la demanda y gracias al esfuerzo y la consagración de los trabajadores del sector eléctrico.
Se han realizado mantenimientos a varias plantas técnicas y a motores de generación distribuida, con lo cual se ha podido recuperar capacidades y llegar así al verano en mejores condiciones, «la palabra empeñada se cumplió», apuntó.
Díaz-Canel destacó que la estrategia no es solo a corto plazo, ahora avanzamos hacia la recuperación energética del país. «Desde esta tribuna vaya nuestro más sentido reconocimiento y gratitud a todos los eléctrico de Cuba y a todos los organismos, entre ellos las Fuerzas Armadas y el Ministerio del Interior, que los han apoyado».
Puntualizó que la recuperación de la industria turística sigue impactada por la inclusión de Cuba en la lista del departamento de Estado de EE. UU de países patrocinadores del terrorismo, y por otras causas relacionadas con la logística, el combustible y la energía, por lo cual no se lograrán los 3,5 millones de visitantes proyectados para el año.
Por otra parte, significó se ha iniciado el rescate de la intervención y ampliación del mercado cambiario, lo que ha permitido canalizar al Sistema Empresarial 110 000 000 pesos; 55,1 millones vendidos a la economía nacional y otros de préstamos.
En cuanto a la producción de bienes y servicios de manera nacional, el Presidente de la República destacó los programas de producción de alimentos –arroz, frijoles, huevos, carne de cerdo–, la industria manufacturera, la energía y otros sectores y señaló que todo cuanto se hace aún no es suficiente.
Sobre la inversión extranjera – señaló– «como resultado de las visitas oficiales en los últimos meses se establecieron las bases, proyectos y programas mutuos de inversión, en sectores como la energía, la agricultura, incluida la cañera, dándose los pasos gubernamentales y empresariales para su materialización en el segundo semestre».
Agregó que esto permite crear condiciones para la recuperación de la capacidad industrial y de respiración con impacto favorable en la factura energética y la exportación de derivados de petróleo en el área.
Además, resaltó el Primer Secretario del Comité Central del Partido se estructuraron los mecanismos y sistemas de trabajo para recuperar los ingresos provenientes de las remesas y otros servicios asociados a la captación de divisas, abriendo nuevos canales y diversificando los existentes, incluidos aquellos que utilizan las criptomonedas en cumplimiento de la legislación vigente. Estas acciones deberán continuar consolidándose durante el segundo semestre.
Expresó que se adoptan medidas e incentivos para fomentar más el uso de los medios electrónicos de pago, como forma más rápida, mediante el encadenamiento de sectores productivos, con la creación de nuevos productos y servicios como forma segura y sencilla de realizar cobros y pagos, sin que medie el uso de efectivo, lo que favorece la disciplina fiscal y la bancarización, incluida su legitimidad.
Explicó que, como parte de la implementación de medidas presentadas a la ANPP para reimpulsar el desarrollo económico, se ha trabajado en equipos multidisciplinarios de expertos del sector académico, economista, funcionarios y directivos de los organismos globales de la economía en la identificación de las distorsiones del modelo definiendo sus causas y condiciones estructurales.
Lo anterior, expuso Díaz-Canel Bermúdez, ha permitido diseñar una estrategia gradual para avanzar en la estabilización macroeconómica durante el segundo semestre de este año y el primero de 2024.
La economía cubana deberá enfrentar un indispensable programa de transformaciones estructurales acompañado de este programa de estabilización en los próximos tres años, como garantía para lograr un entorno favorable al financiamiento y al desarrollo en el mediano plazo.
«Después de un debate tan intenso como el que sucedió aquí sobre la producción y comercialización de alimentos, o sobre los precios abusivos o especulativos y el impacto de ambos problemas en el nivel de vida de la población, insisto en la importancia de hacer uso de las medidas y resoluciones aprobadas y aprovechar las opciones que ofrece la autonomía municipal y el necesario fortalecimiento de la empresa estatal socialista», sentenció.
Reflexionó que «algunas soluciones locales podrían llevarnos al camino de las soluciones nacionales».
El Jefe de Estado afirmó que una discusión transparente, con toda la crudeza que reclama en el momento nuestro pueblo, es expresión de conocimiento de la realidad y de nuestra preocupación y voluntad por perfeccionar la sociedad, conscientes de que la prosperidad y la mayor justicia social por la que luchamos serían imposibles en una sociedad vaciada de valores.
A propósito, el mandatario reiteró, una vez más, que las manifestaciones de delito, indisciplina social y corrupción atentan contra lo más sagrado del proceso de construcción socialista, en tanto profundizan las indeseables desigualdades sociales y afectan la seguridad ciudadana, uno de los pilares del socialismo.
El Estado y el Gobierno cubano -aseveró- no pueden vivir de espaldas al incremento de actividades ilícitas, que se establecen como una economía paralela sumergida, que penetra como un cáncer en el tejido social hasta destruirlo.
«Aquí hemos discutido el tema ampliamente y hemos expresado enérgico rechazo a las manifestaciones de indisciplina y delito. Ahora queda lo más importante: actuar con rigor, articulando toda la fuerza revolucionaria con la dirección del Partido, el sistema institucional, las organizaciones de masas y de la sociedad civil y nuestras instituciones armadas, junto al pueblo», sentenció.
Solo así, agregó, podremos enfrentar adecuadamente la evasión fiscal, el mercado ilegal de divisas, la especulación, la corrupción, la vagancia, la pillería, la burocracia, la mentira, la vulgaridad, la indecencia, en fin, la molestia que ocasionan los comportamientos antisociales.
No obstante, indicó que todo esto se debe hacer sin abandonar las acciones para mitigar otras consecuencias que lo provocan como la disfuncionalidad familiar, la ruptura del vínculo con el estudio y el trabajo en algunos ciudadanos, la no adecuada incorporación a la sociedad de quienes han cumplido sanciones penales, entre otros aspectos.
Para conseguirlo, ratificó, será imprescindible exigir un comportamiento limpio y responsable de los representantes de las instituciones estatales, la sociedad y también de las familias cubanas. «Vamos a enfrentarlo con unidad, coraje, determinación, orden, disciplina y efectividad».
Por otra parte, subrayó que todos los actores de la economía deben actuar con apego a la Ley y a las regulaciones establecidas local o nacionalmente, sin estigmatizaciones, ni generalizaciones absurdas. «Todos son necesarios y debemos defender la participación de todos en la economía del país, pero sin olvidar que esa defensa pasa por el respeto a la legalidad», sostuvo.
Sobre esta Primera Sesión de la actual Legislatura, el Presidente destacó que ha dado continuidad al intenso ejercicio legislativo abierto por la nueva Constitución.
Resaltó que la aprobación de la Ley del Código Penal Militar, en concordancia con nuestra Carta Magna, reviste importancia en aras del fortalecimiento del orden y la disciplina en nuestras instituciones armadas, como elementos esenciales para el cumplimiento de sus misiones, en función de proteger y mantener la independencia y soberanía del Estado, su integridad territorial, su seguridad y la paz.
Asimismo, significó que las sesiones de trabajo de las Comisiones Permanentes del Parlamento en este Periodo Ordinario ratificaron el importante papel que juegan como órgano auxiliar de la Asamblea para el cumplimiento de sus atribuciones.
Destacó el mandatario, sobre todo, el modo en que se presentaron y debatieron esta vez los temas de mayor actualidad e impacto en los barrios, las calles y la vida cotidiana.
Añadió al respecto que el vínculo de los diputados con la base de los diferentes territorios, para la comprobación y verificación de las leyes, políticas y programas seleccionados para el análisis, ha favorecido reflexiones más profundas, objetivas y la posibilidad de aportar sugerencias y propuestas enriquecidas por los intercambios con la población.
Especialmente relevante en esta Sesión -expresó Díaz-Canel- es el debate y aprobación de la Política para la Atención a la Niñez, la Adolescencia y las Juventudes, como parte de la voluntad de fortalecer los derechos de la población más joven, por cuanto apoya sus aspiraciones y sueños.
Indicó que su implementación gradual, en medio de la actual situación socioeconómica, demandará la mayor comprensión de la población y exigirá la más amplia difusión y debate, al tiempo que reiteró que esta Política afirma la voluntad de desarrollar la gestión de Gobierno mediante políticas públicas y que el proceso de creación normativa sea cada vez más participativo y democrático.
Al referirse al papel de Cuba en el ámbito internacional, Díaz-Canel resaltó que la presidencia del Grupo de los 77 más China, que el país ostenta desde enero de este año, fruto del amplio reconocimiento internacional a nuestra política de principios en defensa de los intereses de los países en desarrollo, está reclamando de nosotros un esfuerzo diplomático extraordinario que nos honra como nación.