Carlos González Ruiz

Como parte del proyecto Sabana-Camagüey, del que forma parte el Centro de Investigaciones de Ecosistemas Costeros, CIEC, de Cayo Coco, al norte del municipio avileño de Morón, los entornos marinos y terrestres reportan beneficios, tras las afectaciones severas causadas por el huracán Irma, aunque con signos de recuperación lentos debido a los efectos del cambio climático.

Sobresalen los monitoreos ambientales en los ecosistemas naturales y antropizados, y la prestación de servicios científico- técnicos y de consultoría ambiental, así como
los trabajos de conjunto con el Ministerio del Turismo en la aplicación de planes de manejo que respondan al cuidado y preservación de la biodiversidad y la sostenibilidad de las actividades recreativas.

De igual forma continúan las investigaciones sobre la calidad del agua, tanto de los residuales, como de lagunas costeras y de zonas de playas, elemento fundamental para determinar el bienestar de la biodiversidad y del desarrollo de la actividad turística.

Se destaca además un nuevo proyecto en Jardines de la Reina, al Sur de la provincia avileña, tras su declaración como Blue Park, donde sobresalen varias expediciones con el apoyo internacional y de conjunto con el Centro de Investigaciones Marinas de la Universidad de La Habana.

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