Román Romero López
El empleo de sistemas automatizados de información geográfica posibilitará a especialistas de la provincia de Ciego de Ávila un óptimo aprovechamiento de los datos que proporcionarán equipos donados por el proyecto internacional Euroclima Plus para la medición del ciclo hidrológico en tiempo real.
Rafael González-Abreu Fernández, coordinador provincial de esa iniciativa promovida por la Unión Europea, explicó que capacitan a especialistas de diferentes organismos —las empresas de Recursos Hidráulicos y Aprovechamiento Hidráulico, y entidades correspondientes al sistema de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA)— para la realización de análisis geoespaciales.
La aplicación de conocimientos científicos —dijo— posibilitará efectuar evaluaciones más certeras sobre el comportamiento y las tendencias del agua, con beneficios para el chequeo y la toma de decisiones dirigidas a minimizar los riesgos por intensas precipitaciones, inundaciones y prolongados períodos de sequía, cuya frecuencia aumenta debido al cambio climático (CC).
Explicó que Euroclima Plus aportará al territorio avileño 11 equipos automáticos registradores de niveles de pozos y lluvias, que serán instalados en 10 de los 12 sectores hidrogeológicos de la cuenca de Morón.
Para el control de los volúmenes de precipitaciones ubicarán dispositivos similares en la zona de alimentación de la fuente de Ruspoli, que abastece a 49 000 personas en la ciudad cabecera, y en el Gran Humedal del Norte de Ciego de Ávila, declarado Sitio Ramsar en el año 2002 por sus valores de importancia internacional.
El complejo hidráulico Liberación de Florencia y la Derivadora de Chambas dispondrán de registradores de niveles y lluvias que permitirán establecer con mayor precisión los balances hídricos, además de proveer valiosos datos al sistema de Defensa Civil para la adopción de medidas que preserven vidas humanas y recursos materiales en casos de intensas lluvias.
Los nuevos equipos facilitarán el control del 42 por ciento de los recursos hídricos y más del 80 de las lluvias; en tanto, observadores voluntarios de las precipitaciones poseerán teléfonos celulares conectados a centros de gestión de informaciones en la provincia y el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos para la transferencia de datos.
González-Abreu Fernández refirió que se favorece la toma de decisiones (a corto, mediano y largo plazos) encaminadas a la gestión eficiente del agua, al existir facilidades para determinar los volúmenes de precipitaciones, niveles de escurrimientos que pueden ocurrir hacia los embalses y las posibilidades de recarga de los acuíferos.
A partir de estas informaciones —agregó— podrán emitir criterios sobre lo que sucede con las inundaciones en algunas zonas de la provincia.
Subrayó que el nuevo sistema de medición posibilitará el control del 90 por ciento del líquido en la cuenca La Yana, con reservas superiores a los 408 millones de metros cúbicos de agua y donde se localizan acueductos que abastecen asentamientos poblacionales y zonas productivas de los municipios de Ciego de Ávila, Baraguá, Primero de Enero y Ciro Redondo.