LLamil Ruiz González
La Cátedra del Adulto Mayor se ha convertido en una de las experiencias más eficaces para mejorar la salud tanto mental como física de las personas de la tercera edad en nuestro país, lo que al mismo tiempo pudiera considerarse una necesidad dado el proceso de envejecimiento poblacional que afecta a nuestro país.
Sobre su inicio en la Ciudad del Gallo, Neisy Pérez Hernández, responsable de Extensión Universitaria en el Centro Universitario Municipal Benito Llanes Recino, explicó que se remonta al 30 de septiembre del año 2002, y desde el primer momento se vincularon a ella profesores de la talla de Josefa Báez Luya, Miriam García Cabrera, Juan Carlos Espinosa Trujillo y Osmel de Ávila Brito, entre otros.
Sobre las vías para matricular en la Cátedra del Adulto Mayor y de ese modo adquirir los conocimientos necesarios para enfrentar una etapa de la vida en la que todas las personas pueden seguir sintiéndose útiles y plenas, Pérez Hernández manifestó que la única condición es estar motivado y acudir al Centro universitario Municipal o acercarse a cualquier de los profesores de la misma.
Sin duda alguna la Cátedra del Adulto Mayor constituye en la actualidad una vía para vivir y envejecer a plenitud en un país como el nuestro, donde las personas de la tercera edad ya superan el 20 por ciento del total de la población; una realidad a la que debemos enfrentarnos cada día con todas las herramientas que esta experiencia pone a disposición de la familia cubana.