Filiberto Pérez Carvajal
En la medida que se acerca el 22 de diciembre, día del pitazo de arrancada de la zafra 2023-2024 en Ciego de Ávila, el punto de mira de directivos y trabajadores del sector se sitúa en los escenarios que pueden obstaculizar el proceso en la industria y los cañaverales.
Corresponderá al central Ciro Redondo entrar en acción en la fecha señalada, lo que demandará la terminación, a fines de este mes, del muro de contención del patio de bagazo, en lo cual se labora de conjunto con fuerzas de la Unidad Constructora Militar (UCM).
Precisiones de Eduardo Larrosa Vázquez, director de coordinación y supervisión del Grupo Nacional AZCUBA para la atención a Ciego de Ávila, señalan que el montaje de las chumaceras de bronce de los molinos también será decisivo, proceso cuyo éxito depende del cumplimiento del compromiso contraído por la Unidad Empresarial de Base Cubana de bronce.
Aún está pendiente la reparación de 157 kilómetros de caminos cañeros en Ciro Redondo, y otros 89 en áreas del central Ecuador. En ambos casos, cuando se disponga del combustible, se priorizarán las vías por donde iniciará la contienda, aseguró Larrosa Vázquez.