Por Carlos González Ruiz

Jardines del Rey, es el más extenso y numeroso de los cuatro archipiélagos que rodean la isla de Cuba. Se encuentra abrazado en su porción septentrional por una barrera de arrecifes de coral de más de 400 kilómetros de largo, considerada entre las más importantes del planeta junto con la Gran Barrera Australiana y el Gran Arrecife Mesoamericano.
El topónimo Jardines del Rey le fue dado con la colonización española, cuando Diego Velázquez de Cuéllar, en 1514, le bautizara en honor a su deslumbrante belleza natural y al entonces rey de España, Fernando, el Católico; según cuentan los cronistas de la época, esa fue su respuesta al almirante Cristóbal Colón, que ya había hecho lo propio con uno de los archipiélagos meridionales cubanos nombrándolo Jardines de la Reina, en veneración a Isabel de Castilla.

En tiempos anteriores a la conquista española, los cayos e islas de Jardines del Rey fueron sitio de pesca de los primeros habitantes insulares, aunque, según indican los estudios realizados, no residencia de estos, presumiblemente debido a la escasez de agua potable.

Sus playas, excepcionalmente bellas, poseen una extensión cercana a los 150 km, de los cuales los correspondientes a Pilar, en Cayo Guillermo, destacan por la altura de su duna, considerada la mayor del Caribe insular con 15 metros sobre el nivel medio del mar.

La vegetación de la zona, adaptada a soportar las condiciones de fuerte sol, suelo escaso de componentes orgánicos y con alto contenido de sales, presenta sin embargo diferentes tipos de bosques, que en su totalidad llegan a ocupar el 60 % del área de los cayos.

La gran variedad de hábitats existentes condiciona una amplia diversidad de la flora y la fauna, que alberga un alto nivel de endemismo, lo cual coloca a la zona entre las más ricas en biodiversidad de Cuba y el Caribe. Se reportan 101 familias – más de la mitad de las familias conocidas en la flora de Cuba-, 380 géneros y 708 especies, de las cuales 126 son endémicas, 12 de ellas con distribución restringida.

Dentro de esa gran área geográfica se destaca el destino turístico Jardines del Rey, integrado por los cayos Coco, Guillermo y Paredón Grande, donde la mano del hombre los ha enlazado por un pedraplén que brinda la posibilidad de visitar las bellas instalaciones hoteleras y extrahoteleras, rodeadas de playas de aguas transparentes.