Colaboración de Nancy de la C. Hernández Mesa
8 de marzo de 2021

Al preguntársele a un grupo de hombres de la calle Tomas González entre seis y siete, en la ciudad avileña de Morón, que con qué podría compararse a una mujer, las respuestas con todos sus argumentos no se hicieron esperar: alguien dijo con una flor incluyendo sus espinas, para la defensa, otro habló de una copa, el terciopelo, una araña, y hasta hubo quien la vio como el arcoiris que alegra con sus colores la vida, a pesar de aparecer después de la tormenta.

Y es que estos hombres como regalo a las mujeres de su cuadra, por el 8 de marzo, organizaron en silencio un trabajo voluntario para embellecer ese entorno en el que ella a pesar del aislamiento se ve en la obligación de mover por razones disímiles.

Pero lo curioso es que las féminas del lugar sorprendieron con su presencia y sin avisar junto a su compañero, pareja o a simplemente amigo, ayudaron a que esa calle vista sus mejores galas.
La actividad terminó con un saludo codo a codo y algo que uno de los hombres escribió, con lo que dejó a muchos sorprendidos porque sus dotes de poeta no se conocían:

Para ti mujer divina. /Que asumes cualquier misión /que pones toda razón /en manos de la familia/ y que cualquiera te envidia /por tu fuerte devoción /Hoy tendrás de corazón /tantas mil felicidades /mil besos y mil detalles /que estoy seguro mereces /recibe también con creces mi respeto y mi cariño /que seas feliz como un niño /que a la vida se despierta, /que una música de orquesta /te levante en este dia /y que ganes la poesía /de ser una feliz madre /sin penas y sin alardes /con tus signos de verdades /que tengas felicidades / y la vida te sonría.