Por Leonel Iparraguirre González

En medio de la tensa situación epidemiológica que sitúa al municipio avileño de Morón en Fase de Transmisión Autóctona Limitada, el sector de la educación en el territorio, facilita la permanencia de la fuerza femenina en centros de producción y servicios vitales, con el funcionamiento de dos círculos infantiles y un seminternado.

Rubiseida Infante Suárez, directora del seminternado Ignacio Agramonte, ubicado en el centro de la ciudad, manifiesta que esa escuela acoge desde los primeros momentos a hijos de madres trabajadoras, con la puesta en marcha de un programa de actividades complementarias y un estricto cumplimiento del protocolo establecido para la prevención del virus causante de la Covid-19.

Los niños están ubicados en el aula más espaciosa y ventilada de la escuela y son atendidos por educadoras y asistentes, además de contar con la asesora de salud que diariamente realiza el pesquisaje para deterctar cualquier señal que presenten los infantes.

“Aquí cuentan con actividades en el área de computación, biblioteca, Instructores de rte, visualización de las Teleclases de acuerdo con el grado por el que transsitan, juegos de mes, además de la programación televisiva” puntualiza la directora.

María Alejandra Rivero Parí, es estudiante de prescolar y pertenece al seminternado Antonio Maceo, y con la alternativa que ofrece la Dirección Municipal de Educación, su mamá Marisleidi Parí, no ha tenido que interrumpir su trabajo como elaboradora de alimento en la Empresa Comevila, perteneciente al sector de la Pesca.