En canteras, minas, fábricas, talleres y oficinas, con la experiencia de más de 30 años y el compromiso de producir con eficiencia, no solo el bloque de hormigón su producto líder y premio de la calidad, laboran los trabajadores de la Empresa de Materiales de Construcción de Ciego de Ávila.
Aunque Confianza en el éxito es su eslogan, realmente en el día a día el triunfo es el que confía en Avilmat, nombre con el cual trasciende en el ámbito institucional ese colectivo que recientemente ratificó la condición de Vanguardia Nacional.
Con tantos desafíos por enfrentar, aplican una fórmula eficaz en la gestión integral de sus 11 Unidades Empresariales de Base (UEB): diversificar las producciones con destino a los programas de inversiones, incrementar las ventas minoristas y autoabastecerse de viandas y hortalizas, sinónimo de más atención a sus recursos humanos, entre los de mayor salario en el país.
“Mujeres y hombres de batalla trabajamos aquí”, destaca Amarilis Morales Guevara, directora de la UEB Yeso Punta Alegre, y apunta hacia Ramón Emilio Morel Sánchez, hornero.
Otro guerrero se nombra Jorge Viamonte Mayea, autor de innovaciones relevantes. “Uno de mis aportes, junto a dos compañeros de labor –ejemplifica– consiste en las transformaciones del transportador del yeso que sale del horno con una temperatura entre 150 y 300 grados, por lo que necesita de un equipo del tipo helicoidal que ya estaba deteriorado, trabajamos en la invención del sinfín y ahí está en funcionamiento”.
Considera Amarilis que esfuerzo y resultados serán determinantes para continuar el impulso a las producciones de yeso triturado con destino a las industrias productoras de cemento del país y el yeso calcinado que utilizan en la elaboración de tizas para los centros escolares, renglones con menos volúmenes de producción en el presente año, debido a las roturas de equipos.
/Autor: José Luis Martínez Alejo/