Llamil Ruiz González
El ejercicio final de curso de uno de los grupos pertenecientes a la Cátedra del adulto mayor de la Ciudad del Gallo, tuvo lugar en la casa de la cultura Haydée Santamaría Cuadrado de este territorio, a través de una dramatización en la que intervinieron todos los estudiantes y que mostró la solidez de los conocimientos adquiridos.
Así lo confirmó Miriam García Cabrera, profesora fundadora de la Cátedra del adulto mayor en Morón, quien aseguró sentirse muy complacida con el resultado ya se pudo comprobar cómo cada alumno expresó lo aprendido, demostró sus deseos de renovar los aprendizajes y creó nuevas herramientas para vivir con éxito la etapa de la tercera edad.
Para García Cabrera, la cátedra del adulto mayor es sin dudas una herramienta que les permite a muchas abuelas y abuelos vivir y envejecer a plenitud, especialmente en un país como el nuestro, donde las personas con sesenta años o más ya superan el 20 por ciento del total de la población.
Y es que precisamente convertir a todos los seres humanos en entes útiles sin importar la edad, y ayudarlos a vivir plenamente hasta el fin de sus días, es el motor impulsor de una experiencia que ya rebasa las dos décadas de existencia, durante las cuales se ha hecho imprescindible para la sociedad de la Mayor de las Antillas.