El cinismo del Gobierno de EE. UU., en voz de su embajador, no tuvo eco, en la Asamblea General de la ONU, cuando intentó justificar las acciones criminales de bloqueo contra la Isla, negar la existencia de política genocida de asfixia económico-social, y coaccionar a los Estados miembros para cambiar su voto a favor del imperio.
Primero, viril y contundente, la réplica cara a cara del miembro del Buró Político y canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla; y luego la respuesta firme de 29 países y bloques regionales, que condenaron el bloqueo.
Hoy el mundo votará otra vez en contra de ese cerco extraterritorial que, con fines de dominación, intenta doblegar a un pueblo resiliente y solidario. El Gobierno de Estados Unidos volverá a recibir el histórico rechazo de la comunidad internacional.
/Tomado de Granma/