El 28 de octubre de 1989, Fidel Castro pronunció un emotivo discurso en conmemoración del XXX Aniversario de la desaparición física de Camilo Cienfuegos, destacando la profunda significación de su historia y ejemplo como un testimonio de lo que significa ser un verdadero revolucionario.

“Cobra todo su significado la historia de Camilo, no solo por lo que hizo, no solo por sus heroicas proezas combativas, sino también por sus ideas, por sus conceptos, por sus propósitos profundamente revolucionarios”.

Desde sus primeros años, Camilo Cienfuegos estuvo rodeado de un ambiente que fomentaba las ideas revolucionarias. Proveniente de una familia con antecedentes de lucha, su humildad y su fuerte temperamento lo llevaron a convertirse en un líder nato. No era solo su valentía en el campo de batalla lo que lo definía, sino también su deseo ferviente de transformar la historia de Cuba.

Camilo tenía una perspectiva fascinante sobre la lucha. Para él, cada desafío era una oportunidad y cada injusticia, un llamado a la acción. Su alegría provenía de enfrentar dificultades, siempre con la esperanza de un futuro mejor. Esta visión lo convirtió en un líder inspirador, capaz de motivar a otros a unirse a la causa revolucionaria.

La esencia de Camilo Cienfuegos no solo se limita a su tiempo, sino que se encuentra en cada joven que hoy lucha por un futuro mejor. La afirmación de que “en el pueblo hay muchos Camilo” resalta la idea de que el espíritu revolucionario no es exclusivo de unos pocos. Este legado perdura en la conciencia de los cubanos que aman su patria y están dispuestos a enfrentar adversidades con determinación y coraje.

/Tomado de Cubadebate/

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *